Seguridad durante la práctica del kayak: Aprende a navegar con seguridad

Salir a remar sin tomar algunas precauciones básicas es como salir a la montaña sin tener ni idea de lo que nos vamos a encontrar. ¿Por qué tentar a la suerte? Si quieres disfrutar de muchas alegrías en tus aventuras en kayak, sigue estas sencillas pautas de seguridad:

 

1. Planifica un viaje dentro de tus posibilidades
2. Investiga los peligros y las condiciones meteorológicas locales
3. Crea y comparte un plan de navegación
4. Lleva el equipo de seguridad necesario
5. Vístete conforme al medio
6. No vayas solo

 

1 Planifica un viaje de kayak a tu medida

Pon a prueba tus habilidades en una clase particular o curso de kayak grupal, no lo hagas en un lugar complejo o sin la ayuda de los compañeros. No es necesario que tú y tus amigos seáis expertos, pero todos debéis ser lo suficientemente buenos palistas como para descender el tramo propuesto con garantías. En el caso de los kayaks cerrados, todos los miembros del grupo deben saber salir del kayak boca abajo listos para nadar y al menos una persona debe saber asistir en un rescate.

 

Cuando eres un palista novato, es inteligente minimizar las posibles complicaciones. Piensa en como parar antes de navegar un rápido y como analizarlo para saber si estás al nivel. Si realmente estas en las primeras fases del kayak recomendamos que elijas zonas sencillas para que puedas aprender a llevar la embarcación donde tu quieres.

 

- Aguas tranquilas y pequeñas corrientes: Busca rápidos sin curvas y sin apenas obstáculos en el cauce. Eso te dará confianza y  disfrutarás de las aguas bravas con poco peligro.

- Analiza las masas de agua en movimiento: Debemos ser capaces de interpretar la fuerza del agua y las inercias que afectan a la navegación. Si no eres capaz de leer el río, recomendamos que hagas un curso. Después del curso empezarás a entender mejor lo que sucede a tu alrededor.

- Lugares frecuentados por otros kayakistas: elegir un río popular aumenta la posibilidad de coincidir con otros grupos. Podrían ayudarte si tienes problemas.

- Buscar lugares con acceso fácil a la carretera: Podría ser que despues de un remojón perdamos material y no podamos continuar, debiendo salir a la carretera.

- Evitar zonas especialmente encañonadas: Suelen ser los lugares más bonitos pero la orilla puede ser una pared de roca sin posibilidad de parar. Cuando estamos aprendiendo la orilla es muy importante tanto para hacer seguridad como para analizar los rápidos.
 

2 Investiga los peligros y las condiciones meteorológicas locales

Caudal actualizado. En España los ríos están divididos por cuencas hidrográficas. Cada una de las cuencas tiene un Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) que podemos consultar en internet. Actualizado normalmente cada hora. Allí podemos ver el caudal y la tendencia en horas previas para saber si el río ha sufrido una crecida.

 

Tiempo local: Comprueba las previsiones y las actualizaciones antes de entrar en el agua (utiliza una aplicación para el teléfono o bien otea el horizonte en busca de nubes de tormenta). Si el pronóstico es dudoso, actua de forma conservadora. Si se acerca una tormenta, acorta la jornada.

 

Peligros concretos: Reúne toda información sobre el estado del cauce, desprendimientos, arboles cruzados, represas... lo puedes hacer en una guía o en grupos de redes sociales.

 

3 Crea y comparte un plan de navegación

Un plan de navegación debe contener detalles fundamentales sobre su viaje:

 

¿Quién? Los nombres de todos los miembros del grupo y la información de contacto de cada uno.
¿Donde? Lugar de embarque y desembarque, además de la ruta prevista.
¿Cuándo? Las horas de salida y regreso, y cuándo avisar a las autoridades en caso de retraso.
¿Qué? Un plan de acción en caso de que te retrases.

 

Deja tu plan a la persona que más pronto te echará de menos. Puede que tus padres se preocupen más, pero un compañero de piso puede darse cuenta antes de que no has vuelto. Deja también un mensaje sobre tu plan a gente de confianza.

 

4 Lleva el material de seguridad para el kayak necesario

Asegúrate de probar todo el material con antelación para saber cómo utilizarlo. Algunos de estos artículos son fáciles de usar, otros son un poco más complicados:

 

Chaleco PFD: Tu dispositivo personal de flotación debe ajustarse bien y estar siempre puesto; nunca hay una salida en kayak en la que puedas prescindir del PFD.

Silbato: Colócalo en tu PFD. Un pitido es para llamar la atención; tres pitidos es "ayuda". Si olvidas cuántos, sigue pitando hasta que llegue un rescatador.

Dispositivo de comunicación: Si los silbidos o las voces no son suficientes para pedir ayuda, lleva contigo un teléfono. Si hay cobertura por todas partes, puedes llevar un teléfono móvil en una funda impermeable.

Pala de repuesto: Al principio es más fácil perder o partir una pala. Por ello, si te vas a meter en zonas remotas, lleva una pala desmontable ne la popa. Por lo menos una por grupo.

Cuerda de lanzamiento: Es fundamental para realizar las técnicas de rescate. Si no conoces las técnicas de rescate, debes hacer un curso de rescate para kayakistas con profesionales. Merece mucho la pena.
Cuerda de remolque: Puede ser una simple cinta plana que llevamos en el kit de rescate para remolcar a un compañero que se encuentra momentáneamente indispuesto.

 

Linterna frontal: por si te quedas fuera más tiempo del previsto.

 

La lista anterior incluye el equipo de seguridad mínimo que recomendamos. Para obtener una lista más completa, además de otros elementos esenciales, consulte nuestra lista de Material necesario para practicar kayak en aguas bravas

 

5 Vístete conforme al medio

En este deporte estamos continuamente en contacto con el agua, por ello es importante tomarse en serio la posibilidad de una hipotermia. Conocer la temperatura del agua y la del exterior, nos servirá para vestirnos en consecuencia. Según las recomendaciones de seguridad de los servicios de emergencia, si el agua del lugar al que vas va a estar está por debajo de los 20 grados Celsius, tienes que llevar un traje de neopreno o un traje seco. Para más información, lee Qué llevar en kayak.

 

6 no vayas solo

Si eres un kayakista experimentado, y el tramo elegido está por debajo de tu nivel, puedes hacer el descenso solo, pero conseguirás reducir el peligro si te llevas a un amigo. Un rescate con un amigo es más rápido que un auto-rescate y no hay nada como una persona extra para ayudar en un rescate. Además, es más divertido compartir la aventura.

Mantén el grupo unido: No es útil tener compañeros si el grupo se expande por todo el río, navegando a una distancia excesiva para ayudar. en los rápidos debemos colocarnos en posiciones aptas para la asistencia.